Stefano es mucho más de lo que muestra, a veces viene callado, a veces más entusiasmado y conversador, pero en raras ocasiones muestra todo lo que hay para ver, tenemos la suerte de haber conocido al menos parte de esa mundo interno y encontramos además de un corredor entusiasta, un ser humano entrañable, buenísimo, con una sensibilidad poco común. Es fundamental para nosotros conocer a nuestros alumnos y sus motivaciones para acompañarlos de la mejor manera en sus procesos.
Este corredor es movido por la emoción, siempre, su ambición de mejorar tiene todo que ver con su amor propio, al deporte y a la gente que lo acompaña. Si le hacés cualquier mínimo favor a Stefano prepárate para que te agradezca por semanas, meses e incluso años, siempre recuerda un gesto amable.
Nombre: Stefano De Marco
Edad: 33 años
Ocupación: Casi Licenciado en Marketing
Qué ha corrido? En otra vida, Raid de los Andes, en esta, muchas carreras de calle hasta 21 km y una Maratón de Montevideo.
Siempre vi al deporte como un estilo de vida, y creo que es la razón por la cual se genera mi conexión con PR.
¿Hace cuánto entrenás en PR? Casi 4 años
¿Cuál fue tu proceso de entrenamiento favorito? Por el resultado final, posiblemente San Felipe y Santiago 2023, por el momento personal sin dudas los últimos 21 km de Bs As.
¿Cuál es tu próximo objetivo? No necesariamente próximo, pero no competitivo tal vez poder hacer una parte del Camino de Santiago corriendo y competitivo Maratón en alguna parte del mundo que sea llano.
¿Qué te sumó ser parte de este equipo? Sin duda, orden, compromiso, encontrar y resignificar la enorme diferencia entre salir a correr y entrenar y seguir en la búsqueda del aprender de uno mismo y sobre todo de los demás.
¿Qué le dirías a alguien que recién entra que no se puede perder de PR?
El grupo, sin dudas. Lo humano, va más allá de cualquier marca que quieras hacer, cualquier lugar donde quieras correr.
El grupo te lleva a cualquier lado, siempre vas a encontrar a alguien que está pendiente de cualquier desafío que te propongas.
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